Cómo usar un Irrigador Dental

Cómo usar irrigador dental

Si estás buscando la manera más fácil y efectiva de usar un irrigador dental, estás en el sitio indicado.

Usar un irrigador dental antes de cepillar los dientes puede eliminar la placa y reducir el riesgo de infecciones periodontales e inflamación de las encías. Los irrigadores orales son más fáciles de usar para niños y adultos con poca destreza manual. Además, es una forma suave pero efectiva de limpiar las coronas, puentes e implantes dentales. Finalmente, las personas con aparatos ortopédicos a menudo prefieren los irrigadores dentales para limpiar alrededor de los aparatos ortopédicos y los alambres.

Aprender a usar un hilo dental puede ser complicado al principio; pero estamos aquí para ayudarte. A medida que lo hagas todos los días, aprenderás rápidamente la técnica y obtendrás grandes beneficios de usar un irrigador dental

Cómo usar Correctamente un Irrigador Dental

Use los siguientes pasos simples para comenzar a usar tu irrigador dental:

Colocar el agua
agregue enjuague bucal
Inclinese sobre el fregadero para comenzar
Usar el irrigador dental para limpiar
  • Llena el depósito con agua tibia: Llena fácilmente el depósito de agua quitando la parte superior del recipiente. Agrega una taza pequeña de enjuague bucal al depósito dos veces por semana para crear un ambiente estéril.
  • Selecciona la punta correcta: Tu irrigador dental debe venir con algunas puntas estándar, incluida una punta de chorro clásico, una punta de cepillo de dientes, una punta de buscador de placa, una punta de ortodoncia y una punta de selección. Elije el que mejor funcione para ti.
  • Coloca la punta en la boca para comenzar: Mantén la punta alejada de los dientes y las encías en lugar de tocarlos directamente. Es posible que desees inclinarte sobre el fregadero antes de comenzar para no salpicar agua. 
  • Enciende tu irrigador bucal y a limpiar: Sostén el mango en un ángulo de 90 grados con respecto a tus dientes, enciende y rocía. Comienza con una configuración de baja presión y avance hacia arriba. Asegúrate de que la presión sea alta pero cómoda.
  • Sigue la línea de tus encías: Puedes comenzar por dentro o por fuera, pero asegúrate de rociar cada área interdental. Ve diente por diente para asegurar que todos los restos de comida y sarro sean eliminados. Apunta a la parte superior del diente, la línea de base de la encía y el espacio entre cada diente. Mantén el agua sobre cada diente durante unos dos segundos. Repite este proceso en el exterior y el interior de sus dientes. Te llevará unos dos minutos completarlo.
  • Vacía el depósito: Finalmente, vierte el agua restante. Dejar agua estancada en el depósito puede provocar el crecimiento de bacterias.

¡Y eso es todo al respecto! Acabas de aprender a usar un irrigador dental.


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